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Una fusión de arte y deporte ha tomado protagonismo en el corazón de la escena cultural de Puerto Vallarta con la gran apertura de PKB-Gallery en Perú 1073 en 5 de Diciembre. Este nuevo y vibrante espacio alberga un concepto innovador que promete una experiencia única.
Al entrar en la galería, los visitantes son recibidos por un espectáculo impresionante: una colosal pista de pickleball. (con aire acondicionado) que adorna el centro, flanqueado por modernas obras de arte a ambos lados con bordes de color verde brillante. El ambiente es de creatividad y energía, realzado por las ventanas estratégicamente situadas que ofrecen vistas panorámicas incluso antes de poner un pie en el interior.
Propiedad de Carlos Rivadeneyra Amescua, un apasionado del arte procedente de Ciudad de México y residente en Puerto Vallarta desde hace cinco años, PKB-Gallery es un testimonio de su visión de combinar el arte con el atletismo. Dirigida por un equipo especializado, que incluye a Jared Guzmán, que supervisa la pista de pickleball, y a Alejandra Esparza Padilla, comisaria de la colección de arte, la galería cuenta con una variada gama de obras de nueve artistas de renombre internacional.
La exposición actual incluye obras de nueve artistas de gran prestigio de todo el mundo: Camilo Barboza-Soto, Cristina Gil, Dorota Ziolkowska, Gabriela Muniain, Juan Jo Soto, Kara Rooney, Magdalena Firlag, Roxanna Huerta y Roko De Avila. Todo lo expuesto en la galería está a la venta, y puede determinar el precio y otros detalles poniéndose en contacto con Alejandra, que estará encantada de atenderle.
Carlos Rivadeneyra Amescua describió el aspecto más singular de su galería, que es la asombrosa combinación de una pista cubierta de pickleball, la primera de este tipo en Puerto Vallarta, con grandes obras de arte. Ambos están emparejados en lo que Carlos describió como «la caja blanca».
Para los lectores que no estén familiarizados con este término, como lo estaba yo, describe una habitación, ya sea para una galería de arte o una pista deportiva, que está pintada en un tono blanco brillante, donde las sombras son un visitante no deseado. Esta particular «caja blanca» está perfectamente estructurada, ya que las paredes blancas se elevan hasta encontrarse con el techo muy por encima.
El juego de Pickleball en sí está diseñado para ser jugado con cuatro personas, pero dos bastarán perfectamente. Se juega con palas y pelotas de plástico de colores, parecidas a las de tenis o ping pong. Las reglas básicas del juego son: sólo el que saca puede marcar, no se puede volear en la «cocina», que es una zona de la pista cercana a la red pintada de azul claro, sólo se puede botar una vez la pelota por lado, el saque debe hacerse en la línea de fondo, los saques no pueden caer en zonas que no sean de volea y, por último, el partido concluye cuando uno de los jugadores alcanza 11, 15 ó 21 puntos y va ganando por una diferencia de dos puntos.
Este deporte está de moda en Estados Unidos y Canadá, por lo que cuando Carlos compró el edificio, que antes albergaba una imprenta, el tamaño del espacio se prestó a su visión de combinar un deporte divertido con el arte que atrae a quienes buscan una actividad única.
Esta es la tercera galería de la que es propietario, y la primera que tiene una pista de pickleball, me dijo Carlos riendo. Para reservar una pista, basta con llamar a cualquiera de los dos números de contacto; el precio es de 250 pesos por hora y persona.
Después de un partido amistoso, hay duchas disponibles (por favor traiga su propia toalla), junto con una amplia selección de diversas opciones en el menú, que alimentarán hasta el apetito más voraz. Durante todo el día se sirven deliciosos aperitivos, ensaladas, licores, cerveza y vino, a precios razonables.
Cuando la velada tocaba a su fin, le pregunté a Carlos qué debía esperar el recién llegado a esta experiencia de moda en su primera visita. Respondió con una sonrisa y entusiasmo en la voz.
«Vas a conocer el arte contemporáneo, experimentarlo y, al mismo tiempo, disfrutar de un deporte increíblemente popular que se combina con arte nuevo y moderno», continuó, «puedes venir a jugar, estar abierto y tomar una copa en este espacio luminoso y acogedor», compartió Carlos.
Al despedirme, sonreí, y pensé que podría haber una mejor manera de disfrutar de la diversidad de Puerto Vallarta, realmente lo tiene todo; arte, alcohol, comida y deporte.
PKB-Galería Pickleball-Galería
Perú 1073, Col. 5 de Diciembre, 48350
Horario de atención al público De 8.00 a 20.00 horas todos los días
Teléfono 52 322 222 4115 o 52 55 1224 3528
pkb-gallery.com
Instagram – https://www.instagram.com/pkbgallery/
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