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Las vibrantes letras de Puerto Vallarta son sinónimo de la ciudad, al igual que sus impresionantes playas y su cálida hospitalidad. Estos símbolos icónicos, queridos tanto por los lugareños como por los turistas, se han sometido a una meticulosa restauración para recuperar su esplendor original.
Años de exposición a los elementos habían pasado factura a las queridas letras, desvaneciendo sus colores otrora vibrantes. Junto con una revitalización integral del famoso Malecón, un equipo dedicado liderado por Marcela Lepe Quiroz, hija del renombrado artista Manuel Lepe Macedo, emprendió la tarea de restaurar las letras a su antigua gloria.
Manuel Lepe Macedo, un prolífico artista (realizó más de 2,500 obras de arte) cuyo trabajo ayudó a moldear la identidad de Puerto Vallarta, diseñó y pintó originalmente las letras. Su estilo distintivo, caracterizado por colores vibrantes y trazos audaces, se convirtió en un tesoro local instantáneo. Desafortunadamente, una repintura anterior había alterado el diseño original, disminuyendo el atractivo icónico de las letras.
Marcela Lepe Quiroz, con la asistencia de su sobrino Luis Lepe, emprendió una labor de amor para restaurar la obra maestra de su padre. El proyecto no solo implicó repintar las letras para que coincidieran con el estilo colorido original de su padre, sino también incorporar un recubrimiento anti-graffiti para protegerlas durante años. Además, Marcela añadió su propio toque artístico a los reversos de las letras, creando una mezcla única de lo antiguo y lo nuevo.
El Instituto Vallartense de Cultura supervisó el proyecto de restauración, garantizando su adecuación al patrimonio cultural de la ciudad.
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