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Adan Carano es un artista brillante que combina su amor por el Hula-Hoop con sus ágiles habilidades para surfear, reuniendo elementos que se han vuelto vitales en la vida de Adan.
En la comunidad LGBTQ+, casi todo el mundo tiene una historia de salida del clóset. Esas historias están plagadas de buenas y malas consecuencias, han unido familias o las han separado. Pero una constante en todas esas historias es que cuando una persona decide salir del clóset, ese paso cambia todo en su vida.
Y eso es lo que le pasó a Adán. Su orientación sexual lo obligó a alejarse de su estado natal, Aguascalientes, y de su familia. Ellos no estaban preparados para entenderlo, ni él para explicarlo.
A los 16 años decidió dejar su hogar y su entorno, un lugar que lo dejó deprimido y sin una imagen clara de su propia identidad.
Y así, partió por su cuenta. Mientras viajaba, conoció a un grupo de amigos que eran artistas callejeros, que viajaban a diferentes ciudades de México, y lo invitaron a unirse a ellos. En el camino a través de la República Mexicana, visitó lugares como la Huasteca Potosina, León, Querétaro y Toluca, perfeccionó sus habilidades como artista callejero, realizando asombrosas rutinas de hula hoop que dejaban a la gente asombrada.
Pero al llegar a Sayulita, Nayarit , fue un destino que —sin saberlo— le cambiaría la vida. Sus amigos se fueron sin previo aviso, dejándolo sin nada, ni siquiera un teléfono celular. Con pocas opciones, decidió acampar en la playa durante un mes. Con el paso del tiempo encontró un lugar seguro trabajando en un hostal, y un nuevo amigo comenzó a enseñarle a surfear.
“Mi aventura surfera comenzó en la playa de La Lancha ”, explicó. “Este es un paraíso cerca de Sayulita, y es una gran área para surfistas principiantes”.
Sayulita fue solo el comienzo de su relación con el surf. Después de dominar las olas con su tabla, decidió volver a moverse. Su siguiente parada fue el viejo continente: Galicia, en el norte de España, donde gracias al trabajo voluntario pudo llegar y asentarse mientras seguía practicando Surf, en otro país, con otro clima y otras olas.
“Pero no encontré que el clima me permitiera surfear como yo quería”, dijo. “Así que agarré mi mochila y me dirigí a las Islas Canarias. Allí, en Tenerife, encontré el equilibrio entre las playas rocosas mexicanas y las europeas”.
Las playas de Tenerife le proporcionaban la combinación perfecta para practicar el arte circense y el deporte extremo. Al principio, Adán no creía que sería capaz de realizar semejante locura, pero, cuando se subió a la tabla de surf para dar el primer giro con el Hula Hoop, lo pudo hacer en el primer intento, uniendo sus dos pasiones.
“La comunidad de surf me ha recibido bastante bien”, dijo Adan a O&APV. “A pesar de que el surf es un deporte mayoritariamente practicado por hombres heterosexuales, nunca he tenido reparos en mostrarme tal y como soy, sintiéndome orgulloso de formar parte de la comunidad LGBTQ+, compartiendo aficiones por el deporte”.
Adán cree que hay tres niveles en la vida: Mente, Cuerpo y Espíritu.
“El surf te hace combinar y coordinar los tres, para llegar al equilibrio”, dijo. “Para mí, lo más importante es la pasión, eso es lo que tienes que tener para moverte todos los días.
Cuando Adán salió del armario, sus experiencias previas lo alejaron de la «escena gay», y no le gustaba mucho las fiestas.
“Pero eso me ayudó a encontrarme a mí mismo”, explicó. “Ser rechazado después de salir del armario no me ayudó a sentirme seguro o cómodo para estar cerca de la escena gay. Pero quería añadir que la experiencia y el surf me han servido de motivación para trabajar la autoaceptación”.
Ahora, está listo y disfrutando de nuestra comunidad LGBTQ+. ¡Él tiene planes de abrir una Comunidad Queer de Surfistas en Puerto Vallarta en el futuro! Sería emocionante para aquellos que disfrutan de los deportes extremos.
Él cree firmemente que la comunidad gay necesita más actividades, además de la fiesta. Las actividades culturales, artísticas y deportivas son cosas en las que le gustaría participar más.
“Y siempre estoy buscando aprender algo nuevo”, dijo. “No soy feliz a menos que me esfuerce por alcanzar nuevos límites”.
Con eso en mente, está comenzando a actuar con otros artistas y amigos que lo han invitado a colaborar. Está constantemente buscando maneras de aprender nuevas técnicas de surf y Hula Hooping”.
“Estoy muy feliz porque es otra forma de conectar conmigo, el arte, mi forma de conectar es con el mar, lo respeto, lo cuido, como quiero que lo hagan conmigo”, dijo.
¿Qué hay en el futuro? Adán tiene metas altas.
“Te fijas metas altas y por qué no”, remarcó. “Incluso Circo Del Sol podría estar en mi futuro”.
Si desea ver a Adan realizando su Hula Hooping, puede encontrarlo como parte del Karma Chameleon Show, los miércoles y domingos, a las 9 p. m. en ACT2PV.
Y si te das una vuelta por Sayulita, seguro que verás su Hula Hoop rosa bailando en las olas, de la mano de su pareja, Mr. Surf.
